CHARLATANES DE FERIA empezó a tocar a la 1:20 de la mañana, tan sólo 1 hora 20 minutos más tarde de lo previsto. Ok, era la noche del PUNK, de la bronca, de guitarras por la cintura y de la rebeldía, así que eso de las 12 de la noche era normal tomárselo con pinzas. Por suerte Dieguito (Diego González, batero de Malas Capas, Mar de Dirac, etc, etc.) me había acompañado y el tiempo de espera se esfumó: Che Dieguito, ¿porque los músicos no van a los recitales de otros músicos? “¡Ni idea Cefe!” Yo tampoco, le dije mientras renegaba por la poca luz que había en el escenario para sacar fotos.
Nunca había escuchado a los Charlatanes de Feria y me preparé para verlos con la cabeza abierta (¡¡¡2 bandas de punk seguidas y en la misma noche podría ser demasiado para un Spinettiano como yo!!!). Más allá de sus propias canciones, los Charlatanes hicieron muy buenas versiones de Ramones, Violadores (si, si, obvio, Ultraviolento), Attaque 77 y hasta se animaron a tocar su propia versión casi punk de “Vasos Vacíos” de los Fabulosos Cadillacs. ¡Si Joey Ramone se hubiese levantado de su tumba para escucharlos o bien los aplaudía o los llenaba de pollos! (en definitiva las dos opciones eran elogios para los músicos de Charlatanes).



EL SOTANO (Hijos de los 90)




Lucas (batería y co-fundador) y Juan (bajo y muy buena voz cuando le tocó demostrarlo) forman junto a Riki El Sótano más interesante que yo he visto. Sin dudas el trío y los años les caen muy bien a estos chicos no tan chicos que también se divierten, pero enojados, mientras tocan. ¡Hay aire de bronca contra los 90, rebeldía punk!Punto aparte para el cantante/guitarrista Ricardo Fernández alias Riki; qué bien que nos hace creer lo cómodo que se siente al frente de su banda. Las 100 personas que ayer fueron a verlos no lo inmutaron ni un segundo. Se movió en el escenario (e interactuó con el público/amigos) con la libertad que sienten sólo los que saben lo que están haciendo. ¡No sé si Riki sabe, pero a mi me la vendió muy bien!
Me cagué de emoción con la canción que Juan Sakal, bajista y en este tema voz principal, le dedicó a su padre a mitad del show. Una canción que junto a “Hijos de los 90” no pasó para nada desapercibida para mí.

El final de la noche fue el momento de la nostalgia; subieron al escenario Fabricio Frapiccini en bajo y Sebastián Prieto en guitarra para darle vida a la clásica formación de El Sótano rememorando viejos clásicos. Se notó que se extrañaban, como quien extraña un lugar en el mundo al cual va de vez en cuando o como se extraña un amor. Amigos ellos, siempre serán El Sótano de aquel cumpleaños de 15 y de los puntuales show/cumpleaños de fin de año de la banda. Pero El Sótano de hoy, el trío enojado, me divierte menos pero me gusta más.
A las 4 de la mañana me fui para casa silbando bajito y con un zumbido en los oídos, increíblemente con ganas de escuchar su nuevo disco.
Todas las fotos por Ceferino Pardo.
1 comentario:
Muy lindas tus fotos y muy buena la cobertura de la noche punk. Saludos.
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